viernes, 27 de noviembre de 2009

A toda capilla le llega su fiestecita

Por: Enrique Galván-Duque Tamborrel

Dicen que a toda capilla le llega su fiestecita, pues a la Compañía de Luz y Fuerza del Centro no le llegó su fiestecita, pero si la hora de la muerte, amen.

Lo que acaba de decretar el Presidente Calderón debería de haberse hecho hace mucho tiempo, la ahora extinta Luz y Fuerza del Centro era un verdadero lastre para un país pobre como el nuestro, además de que una verdadera cueva de rateros. La presencia y actuación de un sindicato como el SME era una verdera amenaza y ejemplo de lo que se debe de hacer para acabar con cualquier empresa.

Mi difunto suegro trabajó toda su vida, hasta la jubilación, en la extinta Compañía Mexicana de Luz y Fuerza Motriz S.A. (Mexican Light and Power Company), el sindicato de marras ya era un ejemplo de voracidad y corrupción, claro que no al grado que llegó a tener en los últimos años. Recuerdo todo lo que platicaba al respecto. Los líderes del SME son parte integrante de la MLSM (Mafia de Líderes Sindicales de México), mangoneadora de la gran corrupción existente en ese ámbito. --¿ Y los trabajadores? -- ¡Ah! Esos. Esos están bien fregados gracias a sus líderes. La citada Mafia se creó bajo la égida del general Lázaro Cárdenas del Río, con el ojetivo de controlar a "las masa de campesinos y trabajadores", ahí nació la nefasta forma del corporativismo, que tanto daño la a causado al país.

--
«La vanidad es la gloria de los pobres de espíritu»


No hay comentarios: